"¿Qué vas hacer de tu vida'" (III)

       A las once y media Arturo salió de la pensión. Era una gris mañana de otoño.
   Lo primero era ir a cobrar el seguro de cesantía. A pesar de la escasa suma, le alcanzaría para adelantar el pago de dos semanas de pensión y el desayuno para tres días. Para él, el desayuno era la comida mas importante; podía no almorzar sin sentir hambre, pero en las mañanas, la necesidad de comer era imperiosa.
   Al llegar a la oficina del seguro sacó un numero de atención y esperó. Cuando apareció el número 24 que tenia en su mano, advirtió que le correspondía la misma señora que lo había atendido las últimas dos veces.
  - “¿En que lo puedo servir?”
  - “Quisiera saber el monto del segur, por favor”
  - “Un momento”
    Mientras la mujer apretaba las teclas del computador, Arturo sacó de su bolsillo el finiquito y lo puso sobre la mesa.
    “Bueno, sea lo que sea quiero retirar el fondo acumulado. Aquí tiene el finiquito”
   La funcionario examinó el documento.
 “No es mucho lo que alcanzó a juntar señor Benítez; no se si le convenga retirar tan pequeña suma”
“Señora; le acabo de decir que sea lo que sea, quiero retirar el monto ahora”
    Arturo recibió el dinero y salió de la oficina.
  Caminó quince cuadras hasta llegar el centro comercial. Entro a una fuente de soda y pidió la oferta: “huevos revueltos con tostadas, café o jugo”

   Comió lentamente raspando los restos de la paila. Eran la una de la tarde y el pequeño local comenzaba a llenarse. Arturo había llamado dos veces la garzona pidiendo la cuenta. Se levantó y al dirigirse a la caja, junto a la puerta de salida, sacó el pequeño recibo del seguro y salió del local leyéndolo, como si fuera la boleta que acababa de recibir.

(Continuará)

Sábado 28 de Noviembre de 2015, 23:55

No hay comentarios:

Publicar un comentario